Características de la Pena

La pena tiene varias características fundamentales. Las características de la pena son:
  • Intimidatoria. Debe preocupar o causar temor al sujeto que comete la conducta ilegal, es decir evitar el delito por el temor a la aplicación de una sanción.
  • Aflictiva. Debe causar cierta afectación o aflicción al delincuente, para evitar futuros delitos.
  • Ejemplar. Debe ser un ejemplo a nivel individual y general para prevenir otros delitos,  es necesario que sirva de ejemplo, no solamente al condenado sino al resto de la colectividad.
  • Legal. Debe provenir de una norma legal, que exista previamente en la ley,  es necesario que se cumpla el concepto de legalidad.
  • Correctiva. Toda pena debe tender a corregir al sujeto que comete un delito, debe proporcionar a el delincuente una inserción positiva a la sociedad esto implica que el tiempo de la privación de libertad sea intervenida y se le dote de herramientas para su reinserción.
  • Justa. La pena no debe ser excesiva en dureza o duración, si no que debe ser relativa a la gravedad de la conducta antisocial y la peligrosidad del individuo que la comete.
  • Personal. La pena debe ser personal, es decir, se impone a una persona específica que ha sido declarada culpable de cometer un delito. No se puede imponer una pena a una persona que no haya sido condenada previamente.
  • Humanidad. La pena debe respetar la dignidad y los derechos fundamentales de la persona condenada. No se pueden imponer penas crueles, inhumanas o degradantes.
  • Proporcionalidad. La pena debe ser proporcional a la gravedad del delito cometido. Esto implica que la pena debe ser adecuada y no excesiva en relación con la conducta delictiva.
  • Individualización. La pena debe ser individualizada de acuerdo con las circunstancias específicas del delito y del delincuente. Se deben tomar en cuenta factores como la responsabilidad del autor, la magnitud del daño causado, las circunstancias personales y sociales del delincuente, entre otros.
  • No retroactividad. La pena no puede aplicarse de manera retroactiva, es decir, no se puede aplicar una pena más severa que la establecida en el momento de cometerse el delito. Sin embargo, si una ley posterior es más favorable para el acusado, se aplicará retroactivamente.